Centésimo Quincuagésimo Tercera Entrada

La inspiración brota, las palabras borbotan, una idea, dos palabras ¡Que digo!...¡Una! Suficiente necesaria para que como en Jumanji, en mi cabeza, ¡Es una estampida! caen las letras se deshacen cuando lo hacen se derrumban las ideas y mi cabeza le da con pasión y sin razón al teclado, bajan las palabras por el peldaño del corazón el dedo y se escriben las que puede, despavoridas huyen las letras, las palabras se forman, en este extraño cruzigrama, tu no estas en mi cabeza, y hazme caso no voy puesto de nada, simplemente la inspiración llega, mi boca esta inquieta, la mano se impacienta, soy adicto, adicto a las letras, a lo que hay detrás de ellas, a lo que pueden conseguir ellas, aunque luego llegue las consecuencias, me pueden las palabras, me pueden escribirlas, me puede todo lo que significan, no puedo resistirlo ponme otro gramo y de la siguiente ronda pago yo la cuenta.

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