Entradas

Mostrando entradas de marzo, 2019

Centésimo Nonagésima Entrada

A veces miento sobre mi tormento, aseguro tener de autor bloqueo pero eso no es cierto y es que deje tanto por escribir que mis personajes vienen a mi a reclamarme que los abandoné en algún cuaderno, deje mil historias inconclusas y sus protagonistas vienen a mi en mis pesadillas más profundas pidiéndome que sobre ellos vuelva a escribir, y me levanto y lo intento... mas teniendo el boli en la mano siento que no puedo, porque de joven no pensaba en cosas como en quien le podría interesar nada de lo que a mi se me ocurriera y ahora este es un pensamiento fuerte y que vuelve con recurrencia, y es que deje de escribir para mi y por ellos para escribir por vosotros y ese fue el error, y ahora me encomiendo a remediarlo, escribir por ellos y no por mi ni por vosotros, y ya si eso contaros en algún momento las aventura de cada uno de mis personajes y sus propias gracias y tormentos, desde hoy eso me prometo.

Página Perdida 69

No eres tú, sabes, soy yo, nunca te aguanté, en mi vida no te quise, tampoco quiero que ahora que en ella no estás de ella sepas, te denominaste en algún momento enemigo, pero empozoñabas de todos los oídos, esperando que tu veneno surtiera efecto, víctima por defecto, pensaste claro que sería presa fácil de abatir más se me dio siempre eso de combatir y nunca me supe rendir, y es por eso que como tú en mi vida ha habido mil, mil que no han sabido como hacerme caer y no es que no me hayan hecho daño, es más bien al revés, es que me han hecho tanto, que lo que no soléis esperar es que me levante, os agarre y hasta abajo os arrastre, pero ahora me doy cuenta que de vosotros mil, he hecho bien en alejarme de ustedes, me he rodeado de quien me quiere, y un momento, que me quiere bien, no se ponen la fachada de amigote de esos que solo disfrutan cuando el alcohol está de por medio y de consejos doy mil que para mi no tengo, de esos que no oyen y ni escuchan porque en una torre de marfil viv...

Centésimo Octagésima Novena Entrada

Vengo a hablaros hoy de un dolor, un dolor muy característico, para mí, quizás el peor de los dolores. Y es que este dolor se encuentra situado en el pecho, donde el corazón, y es el dolor de darte cuenta de que hay gente en esta vida a quien queremos y quisimos que debimos haber dejado atrás hace mucho tiempo. Son gente a la que llamamos amigos y amigas por alguna sinrazón desconocida que escapa de cualquier entendimiento, porque cuando lo piensas un poco te das cuenta de que esa gente está en tu vida sin aportar nada, tan sólo un sufrimiento, una ansiedad y un estrés fuera de lo normal, te esfuerzas por mantener una amistad no correspondida, te interesas por esas personas y te dedicas a llamarles de cuando en cuando para que te respondan de manera insulsa, vaga, vacía. Y es que no aportan, no aportan nada nuevo, no aportan nada bueno, te piden consejos que desoyen para luego cambiarte por esa gente que si les baila el agua y que estarán siempre en las buenas pero nunca en las malas...

Centésimo Octagésima Octava Entrada

Que harto de divisiones entre unos y otros, que parezca que en está vida todo sea negro o blanco, y es que amigo es muy triste que la gente te obligue a posicionarte en un bando, que te dan a elegir entre papá y mamá desde pequeño y cuando vas creciendo la preguntas crecen, y ¿estas conmigo o contra mí? Que si no eres de mi equipo, que si no comes lo que yo quiero que comas, que si vas a votar a un partido equivocado, que si izquierdas o derechas, que si pizza con piña o sin ella, que la tortilla es mejor con cebolla y los hay sincebollistas, que si apple o cualquier marca china, que si... ¡Basta! De elecciones ridículas para querer encasillarnos que no hacemos más que quejarnos de los unos y los otros y al final caemos en los discursos aquellos del odio y del amor nos olvidamos, que la cuestión no es separarnos sino encontrarnos, pero seguimos empeñados en ver las cosas en gamas de negros y blancos y nos olvidamos de las medias tintas por defender lo que unos y otros creamos.